Un abismo
Comparar un abismo atisbando el deseo que nace no sé de donde.
Tanto desorden causas en mi caos.
Me reconforta saber que en un instante el fuego eterno de tus labios
me ha de consumir por completo (qué patéticamente romántico)
Tan compleja es mi vida, o tan insípida
Solo es un reclamo de mis manos por tenerte toda, que no puedo
lunes, octubre 27, 2008
domingo, octubre 26, 2008
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Me gustaba saberme como único receptor de aquellas palabras escritas. Me gustaba pensar que nadie más se enteraba de esas cosas.
Hoy ya no es así.
Hoy tengo atravesada una tristeza en la garganta, una vez más.
Hoy, admiran a alguien más.
Hoy, no se me revela un intenso fuego por mirarme ni abrazarme.
No, no a mí.
No puedo hacer nada ante algo que se me advirtió. Bueno, sólo una cosa: aparentar que no pasa nada en mis básicos sentimientos.
De todos modos, ha de enterarse.
JJ
Hoy ya no es así.
Hoy tengo atravesada una tristeza en la garganta, una vez más.
Hoy, admiran a alguien más.
Hoy, no se me revela un intenso fuego por mirarme ni abrazarme.
No, no a mí.
No puedo hacer nada ante algo que se me advirtió. Bueno, sólo una cosa: aparentar que no pasa nada en mis básicos sentimientos.
De todos modos, ha de enterarse.
JJ
miércoles, octubre 22, 2008
Yo Confieso
Padre, confieso que la quiero. Me resguardé en un poema de noche, entre sus cálidos labios y sus manos serenas, entre su blanca piel y su vientre tristísimo. Me perdí en sus pupilas como entre hojas secas y lágrimas reprimidas, perdidas. Me convencí que no debía y no podía. ¿Quien era yo, después de todo, para tenerla conmigo? Nadie, por supuesto. Me siento, me sé ladrón. Debe existir un porqué, pero no lo encuentro. Debe existir un cuándo que no recuerdo, no me interesa recordarlo. Debe existir un cómo que no domino. Debe existir un Dios que permita todo eso y considero, sinceramente, arrepentirme de mis pecados, por que la Gracia hizo que para ella yo existiese, no encuentro otra explicación. Venganza, Justicia Divina, he de pagar por mi alejamiento: Yo pecador, dominante de mentiras dominado. Yo que engaño y no merezco piedad. Yo que sufro por cuenta propia. Yo, con el amor muerto. Yo me acuso, Padre, de Quererla como no tiene una maldita idea. Y temo, confieso que le temo a Dios, por que ahora se que existe, que todo lo ve y todo lo sabe.
Sabe que la necesito, sabe que yo con ella Soy. Entonces sabe donde debe golpear para acabar conmigo. Sabe que mi castigo, el único que realmente me destruirá, ha de ser alejarme de ella, ha de ser quitándomela, llevándose mi único motivo para seguir. Por que la quiero tanto, Padre, que Dios la utiliza para abofetearme con su existencia. Ese Dios que olvidé, rencoroso.
Ese Dios que no olvida nunca a alguien como yo, que lo reta, que lo insulta.
Que lo necesita.
J. Barragán
Sabe que la necesito, sabe que yo con ella Soy. Entonces sabe donde debe golpear para acabar conmigo. Sabe que mi castigo, el único que realmente me destruirá, ha de ser alejarme de ella, ha de ser quitándomela, llevándose mi único motivo para seguir. Por que la quiero tanto, Padre, que Dios la utiliza para abofetearme con su existencia. Ese Dios que olvidé, rencoroso.
Ese Dios que no olvida nunca a alguien como yo, que lo reta, que lo insulta.
Que lo necesita.
J. Barragán
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